México-Tenochtitlan, fundada en 1325, fue la sede de uno de los imperios más poderosos de Mesoamérica. A la capital azteca llegaría en 1519 Hernán Cortés, dando inicio a una violenta guerra de conquista que culminó con el triunfo de los españoles. A partir de entonces y como producto del encuentro de civilizaciones, se formó la Nueva España y la que sería su capital, la Ciudad de México, que durante tres siglos fue parte de la corona española.